Es solo una cuestión de elecciones

Entre varias alternativas que podemos encontrar entre los blogs dedicados a la educación, elegí Educación y blogs (http://educacionyblogs.blogspot.com) por distintos motivos:
- Posee una clasificación de los blogs en diversas categorías (por nivel educativo, por su uso, por materia, según el autor, etc.) de manera que se facilita la búsqueda de acuerdo a los intereses y necesidades de los lectores.

- Posibilidad de suscripción de los lectores a Grouply, una red social educativa, gratuita y propia. Esta red brinda la posibilidad de armar grupos de discusión mediante foros, a los que los lectores pueden suscribirse. En esta red se pueden agregar videos, imágenes, música, dispone de un chat. Cada persona puede crear su propio blog allí. Estos blogs también pueden categorizarse

- Tiene los últimos post de los blogs utilizando Feevy. Con feevy se pueden crear blogrolls dinámicos en los que se muestran los últimos post de los blogs preferidos en una columna. Estos post quedan enlazados con la imagen del editor y un link a su blog.

- Utiliza Planetaki (similar a netvibes) que permite visualizar y leer todas las páginas web o blogs favoritos en una sola página. En este caso es de acceso público.

Pensando qué aplicaciones de todas estas podría utilizar en mi práctica docente:
- Formación de una red social con los alumnos. Cada uno tendría su propio blog. Los post que publiquen tendrán que ver con las actividades a desarrollar. Foros de discusión para esas actividades y otros foros de debate de temas en particular. Podrían subir archivos y videos también.

- Con Planetaki se podrían agregar páginas de interés para la materia que pueden usarse como parte de la bibliografía, de las lecturas o de las actividades. Otro planetaki para el docente que permitiría tener disponibles los blogs de los alumnos de manera de poder seguir la evolución de cada uno de ellos. En este caso de haría de forma privada para que solo pueda acceder el docente).

Yo creo, tú creas, él crea... nosotros creamos

“El conocimiento que está en la organización debe ser utilizado y compartido. La organización debe ser capaz de pensar. Eso significa hacer que el conocimiento exista, más allá del conocimiento individual que tenga una persona en particular” (1999b, en línea). Hay un concepto que se constituye como una de las piezas clave desde los orígenes de Internet: la intercreatividad. Es un concepto desarrollado por Berners-Lee quien la define como “intercambios creativos digitales”. Etimológicamente es la conjunción de dos palabras muy asociadas a la web: interactividad más creatividad. Para explicar esta idea Berners-Lee señala: “Deberíamos ser capaces no sólo de encontrar cualquier tipo de documento en la Web, sino también de crear cualquier clase de documento fácilmente. Deberíamos no sólo poder interactuar con otras personas, sino crear con otras personas. La intercreatividad es el proceso de hacer cosas o resolver problemas juntos”.
De este modo, podemos decir que la intercreatividad nos brinda los mecanismos para que toda la comunidad aporte su conocimiento al producto desarrollado o en desarrollo, en forma horizontal y organizada (Pardo Kuklinski, 2005).
.Hay tres ideas en torno a la intercreatividad:
- Creative commons: una forma de reducir las barreras legales de la creatividad ya que brinda un modelo legal para la distribución y uso de contenidos que serán de dominio público.
- Folksonomías: organización de la información y los datos de manera colectiva y colaborativa, mediante el uso de etiquetas o tags que permiten ordenar y clasificar la información. Esto está construido sobre el principio de cómo ponerse de acuerdo cuando todos sumamos nuestra colaboración con el mismo objetivo en común: aprovechar el conocimiento de los demás.
- Colaboratorio: colaborar + laboratorio. Espacio de intercambio, reflexión y creación colectiva. Cualquier usuario puede aportar sus conocimientos, experiencias o puntos de vista porque lo importante es la construcción de mapas de conocimiento colectivo en constante desarrollo. El máximo aprovechamiento de las tecnologías interactivas para generar y compartir conocimiento.
El concepto de intercreatividad se acerca al potencial colaborativo que está tras el uso de las tecnologías en red porque lo que se construye es un ciberespacio para compartir conocimiento entre personas. Con esta metodología de intercambio creativo, de alguna manera una co-creación, se puede alcanzar un grado de conocimiento cooperativo que enriquece a todos los participantes de esa interacción. Se crea en forma colectiva.

Lo esencial es invisible a los ojos

Hay algo que ronda mi cabeza hace mucho tiempo pero sobre todo desde que las tecnologías de la información y la comunicación (entre nosotros las TICs) han llegado a mi vida para quedarse. ¿Sabemos realmente a quiénes enseñamos lo que enseñamos? Es una cuestión esencial y que frecuentemente se nos pasa por alto. Es cierto que no es una tarea sencilla pero tampoco imposible. Tan solo hay que prestar atención y tener la intención. Tenemos que conocer a nuestros interlocutores cuando pretendemos comunicar algo y que se nos comprenda, debemos adecuarnos a los diversos contextos que se nos plantean a diario. Si no partimos de la base de comprender hacia quienes nos dirigimos, qué expectativas tienen, cuáles son sus deseos, sus temores, sus puntos fuertes y débiles, ¿cómo hacemos para ayudarlos en su formación?
Creo que por todas estas cosas me han impactado sobre manera las conferencias de Sir Ken Robinson. En una de ellas manifiesta que el talento humano es muy diverso y que las personas son buenas en lo que realmente les gusta. Es decir que es una cuestión de pasión, de aquello que entusiasma nuestro espíritu y nuestra energía. El florecimiento y desarrollo humano no es un proceso mecánico sino orgánico, por eso es imprescindible que adecuemos y personalicemos la educación a las personas a las que estamos enseñando. Y esto también tiene que ver con nuestro trabajo como docentes. Nuestros alumnos son muy sensibles para captarnos cuando les transmitimos algo con pasión. Y, además, lo valoran muchísimo. ¿No es ese un buen lugar para empezar?
“Cuando nos apasiona lo que hacemos y además tenemos la preparación adecuada para hacerlo bien, estamos en nuestro Elemento, este estado maravilloso en el cual trabajamos sin cansancio y con gran creatividad. Los colegios y las empresas deberían ayudarnos a todos a encontrar nuestro Elemento para un mejor desarrollo para el futuro.”